Textos que transmiten las obras de Berceo
1.1. EL MANUSCRITO A y LA COPlA I
Tomás Antonio Sánchez publicó por primera vez las obras de Gonzalo de Berceo en 1780 (Colecci6n de poesias castellanas anteriores al siglo xv; t. II, Madrid, 1780). Refiere cómo lleva a cabo esta labor: «En el monasterio de San Millán hay dos manuscritos, uno en quarto y otro en folio, copiados uno del otro, escritos en el siglo XIII, como dice el Rmo. Sarmiento, los quales son copia uno de otro, y en cada uno se contienen dichas poesías. El Rmo. Ibarreta, que posee una copia moderna de ellas, se ha servido franqueármela para cotejar algunas que yo tenía, y copiar las que me faltaban».
Se habían perdido estos dos manuscritos existentes en el siglo XVIII en el monasterio de San Millán, así como la copia de Ibarreta. Esta última fue hallada en el monasterio de Silos y de ella dice A. García Solalinde (Berceo: I Milagros de Nuestra Señora; Clás. Cast., Madrid, 1958, pp. XXIX-XXX.): «En mi edición del Sacrificio de la Misa dí por perdida esta copia de Ibarreta, que después me fue señalada como existente en el monasterio de Sto. Domingo de Silos por mi buen amigo el reverendo padre abad Luciano Serrano. Disfruté de la consulta de este manuscrito en 1914 y hoy tengo a mi disposición una fotocopia completa perteneciente al Centro de Estudios Históricos. Del cotejo del manuscrito de Ibarreta con la edición de Sánchez se ve que sólo de ella se ha servido para darnos todas las demás poesías de Berceo, con excepción de Sto. Domingo y del Sacrificio. Las mismas noticias concretas que nos ofrece acerca de los manuscritos de San Millán no proceden más que de la copia de Ibarreta. Esta fue seguida fielmente por Sánchez, sin que queramos decir que haya leído siempre bien esta moderna transcripción, pues en algunos pasajes estropea el texto de Ibarreta y modifica formas ortográficas sin necesidad, pero hemos de reconocer que también introduce algunas correcciones acertadas».
Los copistas se sirvieron de los dos manuscritos antiguos del monasterio de San Millán, copiando de uno y refiriéndose al otro, al que mencionaban como «el otro códice», según confesión de Ibarreta. El primer tratado de estos dos manuscritos lo hizo Fr. Martín Sarmiento, de los que dice que son «uno en quarto y otro en folio» (Fr. M. SARMIENTO: Obras pósthumas del Rmo. P. Fr. Martín Sarmiento, Benedictino. Tomo I: Memorias para la hIstoria de la poesía y poetas españoles, dadas a luz por el Monasterio de San Martín, de Madrid, y dedicadas al Excmo. Sr. Duque de Medina-Sidonia, Madrid, 1775).
En la actualidad conocemos el ms. en quarto gracias a la copia de Ibarreta (denominada I) por estar basada ésta en aquél fundamentalmente. El ms. en folio lo conocemos merced a los últimos hallazgos. Apareció primeramente una parte del manuscrito en una librería de lance de Madrid. Fue adquirido por la Real Academia de la Lengua en 1925 y publicado luego por C. Carroll Marden (Cuatro poemas de Berceo (Milagros de la Iglesia robada y de Te6filo, y Vidas de Santa Oria y San Millán). Nuevo Manuscrito de la R. A. E. de la Lengua; R F E, Anejo IX, 1928) en 1928, quien lo llamó A y lo describe de este modo: «Contiene 30 folios en pergamino, de letra de principios del siglo XIV, que miden aproximadamente 224 por 319 milímetros. No está encuadernado y los folios están atados o cosidos firme, pero toscamente, formando un librito. Por su estado actual es evidente que es una porción salvada de un código más extenso. ( ...) El orden primitivo de los folios y su contenido los presentamos en el cuadro que sigue. Sabiendo que cada página tiene 8 coplas y sabiendo también cuántas coplas constituyen cada poema de Berceo, podemos incluir en el cuadro de la foliación de las hojas que faltan y establecer que San Millán terminaba en el folio CXLVº.Fols. LXXXVIIIlr -CIr. Milagros; La iglesia robada, 878 -911; Teófilo. 703 -866.
Fols. CIV -CXIIIIr, Santa Oria) excepto el folio CV (coplas 57 -72); CXIIIIv en blanco.
Fols. CIV --CXIIIv en blanco.
Fol. CXV .San Millán) 1 -15.
Fol. CXVI (falta), San Millán) 16 -31.
Fols. CXVII -CXVIIII. San Millán) 32- 79.
Fols. CXX -CXXI (faltan). San Millán) 128 -489».
Después de un examen minucioso, Carroll Marden llega a la conclusión de que A es el manuscrito «en folio» descrito por Sarmiento, y «el otro códice» al que se refiere Ibarreta.
No terminó aquí el hallazgo felizmente. En 1928, Marden encontró el resto del manuscrito en Santo Domingo de la Calzada. Denominó A' a la primera sección y A" a la posterior; luego, A al conjunto de las dos partes.( Berceo, Veintitrés Milagros. Nuevo Manuscrito de la R. A. E. de la Lengua; R F E, Anejo X, 1929) .Este nuevo manuscrito, A, contiene 32 hojas, que miden, aproximadamente, 230 x 333 milímetros, teniendo la primera el número romano L y la última el LXXXVIII; o sea desde la copla 74, correspondiente a la última del Milagro I, hasta la 877, enlazando con A en la 878, para llegar al final de la obra. Faltan, pues, en Milagros, además de alguna hoja intermedia, toda la Introducción y todo el Milagro I hasta la última copla, cuyas lecturas suple Marden por I.
1.2. MANUSCRITOS QUE CONTIENEN LA VIDA DE SANTO DOMINGO DE SILOS
Los monjes de Silos proporcionarían a Gonzalo de Berceo una copia, seguramente incompleta, de la « Vita Beati Dominici», del monje Grimaldo. Así lo manifiesta el P. Vergara en su edición del siglo XVIII: «puso {Berceo} en verso castellano lo que de Silos le enviaron en latín».
Quedó reforzada esta creencia después de la comparación que Fitz-Gerald hizo entre la obra de Berceo y el texto de Grimaldo (FITZ-GERALD: Berceo: Vida de Santo Domingo de Silos; ed. y notas, París, 1904). Básicamente le sigue en todo, y sólo se han de señalar, como puntos de divergencia, algunas pequeñas particularidades, como son ciertas intercalaciones en la Vida de San Millán, la distribución en tres partes o libros (El P. Andrés ofrece una exposición muy detallada acerca de la transmisión de la Vida de Sto. Domingo en la Edici6n Critico-paleográfica del códice del siglo XIII, Madrid,1958).
Fitz-Gerald no tenía noticia, en 1904, ni del manuscrito original ni de su copia contemporánea. Sí la tuvo, en cambio, de los manuscritos del s. XIV: E (de la Real Academia de la Lengua) y H (de la Academia de la Historia).
1.2.1. Manuscrito S
En 1917, el P. Fr. Alfonso Andrés dio a conocer un manuscrito de la Vida de Santo Domingo, de los siglos XIII-XIV, denominado S ( «Notable manuscrito de los tres primeros hagiógrafos de Santo Domingo de Silos. Siglo XIII-XIV», en BRAE, IV, 1917), anunciando una próxima edición del texto,ya que tiene el valor de ser el más antiguo de los conocidos. Como sabemos, la edición no se hizo hasta 1958, Este manuscrito fue hallado en 1915 por un monje de Silos, Fr. Mateo del Alamo, en una casa de Carazo, pueblecito muy próximo al monasterio de Santo Domingo. ( nota 1 )
El lector podrá encontrar una descripción completa de tal manuscrito en la ed. del P. Andrés. Nosotros traeremos aquí únicamente los datos y conclusiones que han de sernos útiles para el conocimiento de la transmisión textual de las obras de Berceo. De esta manera, nos será permitido prescindir de otras referencias más detalladas de las principales copias y ediciones (LAS DE ARIZ-CASTRO (S. XVII), RUIZ MONTIANO, (S. XVII), P. SANDOVAL (S. XVII), P. ALONSO CORRAL (s. XVII), TAMAYO SALAZAR (S. XVII), P. GREGORIO ARGÁIZ (S. XVII), P. VERGARA (S. XVIII), así como las más recientes y ya mencionadas).
El P. Andrés prueba que S es la fuente de la copia H. El texto y la lengua de S, copiado sobre el original probablemente en San Millán de la Cogolla por un monje de Silos, es más arcaico que el del ms. E. El copista fue contemporáneo de Berceo, y éste quizá el corrector, que figurará como S2. Efectivamente, el P. Andrés ve como más probable «que un monje de Silos sacase del original de Berceo, entre 1225 y 1240, y en San Millán,1a copia S del siglo XIII, a la que posteriormente, lo más tarde a mediados del siglo XVI, se agregaron la copia de la Vida de Santo Domingo de Silos de Grimaldo, y los Miraculos Romanzados, de Pero Marín, cual hoy se conservan, encuadernados con Berceo, en el Archivo de Silos, en el códice, el cual publicó íntegro el P. Vergara».(Ed. ANDRËS, cit, p.XX)
1.2.2. Manuscrito H
La letra es de la segunda mitad del siglo XIV. Escrito a dos columnas. Hay algunas correcciones posteriores. Sánchez lo llamó «Códice de Monserrate» por hallarse en el monasterio de Nuestra Señora de Monserrat, donde permaneció hasta el año 1835; luego pasó a la Real Academia de la Historia, y allí fue colocado entre los s manuscritos de don Luis de Salazar. Procede del ms. S. El copista debió de ser un monje de Santo Domingo, y la copia se efectuó en el monasterio de San Martín de Madrid, filial entonces del de Silos. Lo mismo que en S, faltan los versos desde 686a hasta el 758a, por lo que es fácil deducir que la laguna que ofrece S era ya muy antigua, anterior a la copia H. Sin embargo, contiene los versos 767c y 777c, que no están en S. Y, según Fr. A. Andrés, este último «quita valor a H, que ahora sólo sirve para suplir la mitad perdida del folio hoy núm.20c del ms. S, y determinar aproximadamente la época de algunas correcciones en S con el que coincide también en no pocos errores comunes». Por otra parte, el manuscrito H2 .que anota Fitz.GeraId no es. más que la continuación de la copia del ms. S (Ed. ANDRÉS, cit, p.XXXV)
1.2.3. Manuscrito E
Hoy se halla en la Real Academia de la Lengua. Denominado E por Fitz-Gerald. Letra de la primera mitad del siglo XIV. Tiene algunas anotaciones marginales de épocas posteriores. Escrito a una columna. Faltan los versos 545a hasta 560d por haberse perdido el folio 180; asimismo, los versos 90a-d, 137d, 168d, 207c, 263a hasta 264d. Procede probablemente del original; el copista debió de ser un monje riojano y de San Millán. Fitz-Gerald cree que el ms. E es «el más completo de la Vida de Santo Domingo», «el de mejor ortografía y letra de los conocidos en su tiempo, v. g., los Mss. H y A del siglo XIV». El P. Andrés añade que la copia se hizo en San Millán de la Cogolla sobre el original, de 1300 a 1325; que el copista modernizó el lenguaje. Formó parte del ms. en folio (A), en el que se copiaron todas las obras de Berceo, poco después de su muerte, según detalla el P. Sarmiento. Así, la numeración romana que lleva el ms. encaja con el resto de las obras. E se desmembró y remitió a Silos. La parte relativa a la Vida de Sto. Domingo se envió a Madrid para que el P. Vergara pudiera copiarla (Por otra parte, hemos de dar cuenta del excelente trabajo de ALDO RUFINATTO: La lingua di Berceo. Osservazioni sulla lingua dei monoscritti della Vida de Santo Domingo de Silos; Universita di Pisa, Istituto di Letteratura Spagnola e Ispano-Americana, 1974. El autor estudia la lengua de los manuscritos S, H y E en cuanto a las grafías, vocalismo, consonantismo y morfología con un doble prop6sito: 1) La reconstrucci6n del riojano medieval; 2) la reconstrucción de la lengua de Berceo
(El mester poético de Gonzalo de Berceo,Gaudioso Giménez Resano,1976,Instituto de Estudios Riojanos)
1. Nos escribe Enrique, de la Familia Carazo, lo siguiente :
"Fr. Mateo del Alamo no encontró el manuscrito de la Vida de Santo Domingo de Silos.El manuscrito era conservado en custodia por la familia Carazo, después de haberlo puesto a salvo de la rapiña del Ejército Napoleónico.La familia Carazo, restituyó el manuscrito al monasterio de Silos según la información que yo tengo de mis parientes.Claro, el apellido Carazo coincide con el nombre del pueblo Carazo."