La sigillata hispánica, como cualquier otro tipo de cerámica, no es más que un elemento secundario, de importancia relativa, dentro de la vida económica de un período histórico en cualquier país, pero desde el momento, que para el estudio de la economía del Alto Imperio las fuentes son muy poco explícitas, el conocimiento de estos centros de Producción de T.S.H., se convierte en una fuente primordial para establecer las relaciones comerciales, las áreas de difusión y los niveles de producción alcanzados. |
La difusión de los talleres que estudiamos es extraordinaria, comercian sus productos en toda Hispania, Sur de Francia, Portugal, Italia, Alemania, Inglaterra y, sobre todo, en Mauritania. Estas zonas del Imperio tienen documentada cerámica, ya sea firmada o no, de los alfares riojanos. Así, en la Galia, las localidades de Saint Bertrand de Comminges (1), Saint Jean le Vieux, Marsella, Dax, Bordeaux, Camblanes (2); en Portugal se encuentra de manera más frecuente en yacimientos como los de Citania de Briteiros (3), Chas de Tavares, Conímbriga (4), Aramenha, Lisboa, Caetobriga, Vila Vicosa, Aljustrel, Beja, Troia, Elvas, estos últimos documentados con marcas de alfarero, el único lugar que posee marcas de alfarero y a su vez, formas decoradas, es Conímbriga; otra de las zonas de comercialización privilegiada es Mauritania, ciudades como las de Lixus, Cotta, Volúbilis, Banasa, Sala, Constantina y Tamuda importaron volúmenes importantes de mercancía (5); no así la Britania, donde sólo tenemos constancia de una marca de alfarero, pero es un hecho muy significativo, se trata de SEMPRONIVS, el mismo alfarero que se encuentra en Colonia (6), a quien pertenece uno de los talleres de más capacidad expansiva de Tricio, al igual que el de los alfareros VALERIVS PATERNVS, marca que también está documentada en Germania inferior, en el campamento de Kastell Stokstadt (Aschaffenburg), construido por Domiciano en el año 83 d. C. (7). Por último, Italia, de Ostia se han publicado varios fragmentos de sigillata hispánica procedentes de los alfares estudiados (8).
Si se da este comercio extrapeninsular, con mayor facilidad se produjo una gran difusión de estos productos por Hispania, tanto en la zona Norte, Centro y Sur, llegando incluso a las Baleares, es el caso del alfarero LAPILLIVS, de Tricio, que está documentado en Ibiza (9) y estamos seguros que las excavaciones de Pollentia nos ofrecerán más datos acerca de estas relaciones comerciales.
De esta manera, queda claro que los productos fabricados en nuestros talleres gozaron de una alta aceptación, produciéndose una gran demanda, por lo cual los índices de productividad fueron muy elevados y esta capacidad industrial, tal vez, ofreció gran competencia a los productos sudgálicos que dejaron de venderse en Hispania muy encarecidos. No queremos decir que todos los talleres tuvieran tal grado de industrialización, conocemos alfareros muy poco difundidos y en los sitios documentados cuentan con pocos vasos propios, pero existe un número respetable de talleres con una gran actividad y despliegue comercial como es el caso de VALERIVS PATERNVS, SEMPRONIVS, LAPILLIVS, que no sólo abastecen una demanda de consumo de ámbito local o regional, sino, incluso, imperial (10), índice del auge económico y comercial de los siglos del Alto Imperio.
La romanización temprana de esta zona del Ebro y las condiciones favorables del terreno trajeron consigo la ubicación de varios núcleos alfareros que pronto lograron un desarrollo industrial y comercial elevado gracias a las buenas comunicaciones terrestres y marítimas, a través de la depresión fluvial del Ebro. Los Centros de producción riojanos se convertirán en los grandes talleres con exportaciones a gran escala y con una red de distribución organizada y rápida al igual que los talleres de La Graufesenque y de Montans, produciendo un tráfico comercial ya por las calzadas romanas o por el Mediterráneo.
Este hecho socio-económico de mediados del s. I d. C., de gran transcendencia para la historia económica y comercial del Alto Imperio, si se produjo, fue por una aglomeración de varias "officinas" en una misma zona; probablemente pondrían los alfareros en común sus recursos propios; estos lazos cooperativos traen consigo una serie de ventajas a la vez técnicas, como podrían ser los hornos en común, extracción, transporte y decantación de la arcilla, motivos decorativos y comerciales; estos grandes talleres debían tener, posiblemente, negociantes encargados de la exportación y colocación de los productos fabricados a través de las vías romanas y por el Ebro emprenderían camino hacia Dertosa y Tarraco, lugares en donde se desplegarían hacia Marsella, la península italiana, costa mediterránea y hacia el Norte de Africa. Tal vez, las corrientes fluviales de la Bética, el Guadalquivir y Guadiana fueron empleadas para este comercio; ciudades como Itálica, Corduba, Emérita, con un gran poder adquisitivo y fuerte presión demográfica, experimentaron una gran demanda y se vieron abastecidas de esta manera, de forma menos costosa. Estos comerciantes, que tuvieron que ser abundantes, estarían al servicio de los grandes alfareros, los más activos, y otros de categoría inferior, artesanal, es probable que se dedicaran a completar los pedidos hechos a los primeros; estos alfareros son los que se encuentran de manera muy esporádica en Marruecos y nuestros talleres, puede ser el caso de la firma SCRIBONIVS.
Se puede decir que todos los alfareros hispánicos, a excepción de los de Andújar (11), que vienen a coincidir con los de la Serie B de Boube, están representados en los talleres que estudiamos, si no de una manera total, sí, una parte de la firma, por el momento; con el tiempo, cuando se hagan varias campañas de excavación, aparecerán casi la totalidad, ya que el resto de los talleres están muy aislados, no forman grandes conjuntos alfareros, tienen una economía autárquica y no aportan nada de cierta importancia a la historia comercial de los siglos I y II, menos Andújar, en cuanto al comercio con la Mauritania, puesto que en Hispania sus productos están muy poco difundidos en torno al Guadalquivir.Por lo tanto, no es extraño que de cualquier índice de alfareros nos encontremos con la mayoría procedentes de nuestros alfares. De los publicados por Mezquíriz (12): ACCVNICVS, AEMILIVS, AGILIANVS, LAPILLIVS, CALVO, PATER, SEMPRONIVS, Y ALERIVS PATERNVS, sin contar los talleres asociados, de los cuales una parte también está representada: APASA (nos inclinamos por la lectura VALERIVS PATERNVS SA), ATTIYS PATERNVS, MATE.ACC (asociado con ACCVNICNS), SAA GENIO TITI, etc. Este es un camino que se puede seguir, científicamente correcto, para completar las tablas de alfareros de los centros riojanos difundidos por la Península y Marruecos; es decir, que si PATERNVS, alfarero de Tricio, aparece asociado a ATTIVS, este alfarero es de estos talleres, porque una asociación entre talleres muy distanciados no es admisible, pero entre los talleres riojanos concentrados en una zona de radio muy pequeño, sí; y si a su vez, este último aparece asociado a BRETIVS, ATTIVS BRETIVS, BRETIVS también lo será.
El hecho de la asociación de alfareros, en algunos casos, hay que admitirla, porque no cabe la solución del tría nomina y porque de otra manera, de una forma aislada, no se verían dotados de la fuerza emprendedora necesaria para nutrir un mercado tan alejado, en algunos casos, cuyos costes tuvieron que encarecer el producto fabricado y, por otra, se necesitaba mantener un personal intermediario que, a su vez, fueran receptores y distribuidores en las ciudades donde residían, para garantizar la venta.
Esto es lo que explica que la mayoría se presenten asociados, de forma muy variable, en el período de dos o tres generaciones: la familia PATERNVS, alfarero de Tricio, a lo largo de los años de fabricación firma de las distintas formas: PATER ALE, PATER ATI, PAT.C.VITALI, VALERIVS PATERNVS, FRONTINVS PATERNVS, SEMPRONIVS PATERNVS, SAPA, lo mismo sucede con el taller de SEMPRONIVS, VALERIVS, FRONTINVS. Las asociaciones de alfareros son extrañas en la Galia, de las 6.000 marcas que recoge el Index de Oswald, sólo unas 150 pertenecen a asociaciones.
En nuestros talleres son abundantes, aunque se dan casos de alfareros aislados firmando solos sus productos. Recogemos: AN .MTR (ANIVS MTR), CAI.LV.OFI (CAIVS y LUCIPIVS), LV.SEM (LVCIPIVS o LUPIANVS y SEMPRONIVS), L.SEM. VALE (L.SEMROPNIVS VALERIVS), M.FVS(MEMOR FVSCVS), Q.L V. FLA (Q.LVCIPIVS y FLACCVS o FLA VINVS), SA GENI TITI (SA GENIVS TITVS), T.L.S. (TITVS LVCIPIVS SEMPRONNS). Todos estos alfareros asociados se encuentran en Marruecos y generalmente en lugares muy dispersos tanto de España como de Portugal.
En la actualidad, deshacer todo este entramado de alfareros para buscar las zonas de comercialización de tal alfarero en concreto resulta complejo, pero en el momento que conozcamos todos los talleres, sus alfareros y la cronología, ya podemos establecer qué alfarero trabaja primero y en qué momentos sucesivos se va asociando, variando por tanto su producción.
En este camino hacia la reconstrucción de los mapas de Difusión de cada alfarero se presentaban una serie de obstáculos: "los homónimos" ; productos firmados por PATERNVS de Tricio, se atribuyen a PATERNVS del Sur de la Galia (13); SEMPRONNS, de Tricio, igualmente sus productos se han atribuido al alfarero SEMPER del Sur de la Galia, de época Claudio-Nerón (14); CALVVS se atribuye a La Graufesenque por Thouvenot (15); AEMILIVS se encuentra en Lezoux (16), A VITVS, en La Graufesenque, Lezoux, Rheinzabern (17); FVSCVS, en La Graufesenque (18); MASCVLVS, también en La Graufesenque (19); PATER, en La Graufesenque y Lezoux (20), y VALERIVS PATERNVS, en el Sur de la Galia (21), y ANNIVS, homónimo de otro del Centro y del Este de la Galia (22). Leglay (23) atribuye los productos de CALVVS, ANIVS y SEMPRONIVS a alfareros del Centro y del Este de la Galia.
Esta frecuencia de homónimos, tal vez esté explicada porque los primeros alfareros fuesen sudgálicos, hecho hasta hoy no resuelto.
La zona que recibe mayor porcentaje de productos es la Mauritania; como hemos dicho, la mayoría de los alfareros riojanos trabajan este mercado: ACCVNICVS, AEMILIVS, AGILEIVS, AN MTR, AVITVS, CAI.LV.OFI, CALVO, G.ANNIV.TR, G.COR (NELIVS) FVSCVS, G.F.PAT, G. SCRIBONIVS, OF IVM, O.LV.SEM, L.SEM. VALE, MASCVLVS, OF MTR, MEM.FVS, OF PATER, OF PA. VE, Q.LVC.FLA, Q.V., SA GENIVS TITI, OF SA, EX OF SEGA, OFI SEMPRONI, OF T .L.S. y OF V AL.PAT , esto en cuanto a marcas en vasos lisos; las de los vasos decorados, por los motivos decorativos, tanto ATTO como SA GENIO TITI, también, posiblemente sean de nuestros talleres.
Otra de las zonas más importantes de comercialización fue la Lusitania; Conímbriga es la ciudad que más datos ofrece, entre los alfareros estudiados se encuentran: ACCVNICIVS, AGILIANVS, CALVO, LAPILLIVS, LV.SEM, L.SEM.VALE, SN, SEMPRONIVS, VALERIVS PATERNVS, TREB.TR. Como podemos ver, a excepción del último alfarero, que es de Bezares, el resto de los alfareros son de Tricio y no se encuentra en Conímbriga ninguno de Arenzana de Arriba, lo que quiere decir que el comercio con la Mauritania es anterior al comercio con la Lusitania, e igual pasa con los alfareros de Mérida; aquí trabajan, se puede decir, los mismos que en Conímbriga, como es lógico, dada la proximidad geográfica, ACCVNICIVS, SEMPRONIVS y VALERIVS PATERNVS.
En cuanto a la Bética, son varios los alfareros, sobre todo tricienses, que comercian con esta provincia: LAPILLIVS, que se encuentra en Itálica y Corduba; PATERNVS, en Corduba e Itálica; ACCVNICVS, en Itálica; SEMPRONIVS, en Almodóvar, Itálica y Belo, y VALERIVS PATERNVS, en Sevilla y Lebrija.
La zona centro, menos conocida, nos ofrece unos datos muy significativos que señalan que el comercio por las vías de Caesaraugusta- Emerita y la de Asturica-Emerita fue floreciente a mediados del s. I y durante la dinastía de los flavios, época de producción de los alfareros TREB.TR y CALVO, que se encuentran en Caparra, OF T.L.S., en Alcalá de Henares, LAPILLIVS, en Hontalba y Villaverde.
Una de las regiones de las que más se ha hablado ha sido la levantina o, más en general, la costa mediterránea; se decía que la sigillata hispánica no está documentada en este ámbito geográfico porque debido a sus relaciones comerciales con la Galia y otros países mediterráneos no tuvo aceptación. Podemos decir, a pesar de los escasos materiales publicados, que nuestros alfareros trabajaron comercialmente esa zona no por una vía interior terrestre, sino, según todos los indicios, por el Mediterráneo desde Dertosa hacia el sur, camino hacia la costa africana, por lo menos durante los s. I y II. Estas ideas están confirmadas por la presencia en Lucentum del alfarero OF T.L.S., alfarero de Bezares, CALVO, de Tricio; en Saguntum y Villareal, de AGILIANVS y, sobre todo, en el sector norte, en la costa catalana, OF L.SEM, LAPILLIVS, IVMA, AN .MTR, ACCVNICIVS, AGILIANVS, VALERIVS PATERNVS, SEMPRONIVS, todos ellos en Tarraco, y además, VALERIVS PATERNVS, en Barcino y en Emporiae. Lo cual quiere decir que Lucentum y Tarraco (24), dos ciudades de las que se han publicado marcas de alfarero, han aportado marcas de nuestros talleres; el día que se publiquen estampillas de más yacimientos levantinos, seguramente aparecerán alfareros de los centros estudiados, porque, como vemos, no es una región descuidada comercialmente.
La zona Norte, hasta el momento actual, pocas fuentes había aportado en este sentido, hecho que hacía pensar a todos los historiadores que era la Bética, zona privilegiada en estos hallazgos, y la Lusitania, las que habrían suministrado a la región septentrional y las que poseían los centros de producción. Es decir, había un conjunto de alfareros que sólo se conocían en el Sur de España (25) y en Portugal (26): AEMILIVS, AO, L.CLO, MATERNVS, BLAESIVS, NEDITVS, OCTAVIVS, PATER o PATERNVS, SEGITRITVS, SVRVS, etc., estos alfareros se encuentran en Marruecos y Boube (27) cree que probablemente sus talleres se encuentran en la Bética o la Lusitania.
Otros alfareros, ACCVNICVS, AGILIANVS, L V .SEM, SEMPRONIVS, TITVS, V ALERIVS PATERNVS, LAPILLIVS, etc., estaban en el Sur, en Belo, Sevilla, Itálica, Córdoba, Almodóvar, Mérida; en el Centro y Norte, Corella, Liédena, Julióbriga, Mallén; en la costa mediterránea, Tarragona, Sagunto, Lucentum y, por fin, en Portugal, A Represas, Serrones, Conímbriga, Portalegre, Padraozinho, Belén y Troia de Setubal, pero, sin embargo, a pesar de esta difusión penínsular, los investigadores Mezquíriz, Fernandez Miranda, Mayet, seguían pensando que las fábricas estaban instaladas en el Sur de la Península, sobre todo las de SEMPRONIVS, VALERIVS PATERNVS y LAPILLIVS.
Solamente en el caso de los alfareros que se encontraban en el Norte y Marruecos, Boube admitía que, tal vez, estos talleres estuvieran en el Norte, CALVO, ATTIVS, BRETIVS, SAA GENIO TITI y QVARTVS.
En el estado actual de la investigación nadie se podría imaginar que fuera el Norte el que abasteciera de cerámica toda Hispania y gran parte de la Mauritania, los alfareros conocidos se encontraban tanto en Andalucía como en el Norte de Africa luego, era lógico pensar que los talleres estuviesen localizados en la Bética e, incluso, en la Mauritania, ya que la exportación, en un único sentido o en los dos de forma simultánea, a corta distancia podía ser practicada con facilidad.
Como se ha visto a lo largo de nuestro estudio son los talleres riojanos, es decir, el Norte el que aprovisiona al Sur de Hispania de cerámica sigillata.
Para determinar un centro de producción y una zona de expansión es preciso dibujar los mapas de distribución de las marcas de alfareros, esta tesis fue defendida por Lamboglia en la Reunión de Conímbriga de 1975 (28).
Por este motivo hemos confeccionado algunos mapas de distintos alfareros ya de Bezares o de Tricio y podemos observar que las zonas de comercialización son idénticas. Igualmente, se puede hablar de los mapas de distribución de los punzones idénticos que vienen a coincidir, como es lógico, con los anteriores, la venta de productos lisos y decorados era unísona. En lugares documentados con vasos decorados, con el tiempo, aparecerán vasos o platos lisos firmados.
En nuestra Tesis Doctoral hemos presentado algunas cerámicas de diversos lugares, no sólo de España, en las que se comprueba su identidad y procedencia, son productos fabricados en nuestros talleres (29).
Así, en el vaso de Almendralejo, publicado por el prof. P. Palol, se puede comprobar que la mayoría de los punzones están en nuestros talleres de forma muy frecuente, los punzones anteriores proceden de moldes de Bezares.
Existen otros lugares, menos documentados, pero con elementos de juicio suficientes para poder afirmar que proceden de estos talleres, los de Ampurias, Arcóbriga, Astorga, Citania de Briteiros, Bílbilis, Cacabelos, Tierra de Campos, Caparra, lugar donde han aparecido dos alfareros, uno de Bezares TREBIVS TRITIENSIS, y otro de Tricio, CALVO, pero en el estado actual de la investigación no podemos asociar a los dos alfareros enumerados los vasos decorados encontrados en Caparra, ya que tal vez aparezcan otros alfareros, aunque, en este caso concreto, uno de los vasos se encuentra exacto en Numancia, donde también comercia el alfarero CALVO, luego se podía concluir que ese vaso es propio de tal alfarero, lo mismo podíamos decir de los vasos de Córdoba y el alfarero SEMPRONIVS.Yacimientos importantes por el gran número de vasos, procedentes de estos centros, son Conímbriga, Itálica, Julióbriga, Liédena, con elementos decorativos propios de Tricio y Arenzana de Arriba, Mérida, donde recogemos un vaso de calidad extraordinaria publicado por los profs. Almagro y Caballero, que sin duda alguna procede de nuestros talleres, hay punzones característicos de Bezares, núms. 3, 4 y 5, y otros de Tricio, núms. 1 y 2; a su vez estos punzones se encuentran en Conímbriga, Pedrosa de la Vega, Almendralejo, etc., en vasos que también han sido fabricados aquí.
En la lista de yacimientos importantes podemos incluir Mallén con vasos de idéntica línea y punzones exactos a los estudiados, Numancia, Pompaelo, Pedrosa de la Vega y Tarragona. Otros, no de menor importancia, pero sí menos documentados, son Corella; lruña, Lancia, Murias de Beloño, Olocau, Palencia, Uxama y Viana, y los de excepcional interés Ostia y Saint Bertrand de Comminges.
Como podemos observar, la producción de estos talleres está distribuida por toda la Península y por zonas muy relacionadas, desde el punto de vista comercial, ya en los s. I y II, con Hispania, Sur de Francia, Italia y Norte de Africa.Por otra parte, en todos los yacimientos romanos de la Rioja, como era de suponer, hemos encontrado cerámica de los talleres ubicados en la zona. Estos núcleos serán objeto de estudio en el capítulo dedicado al poblamiento de la profesora Solovera (30). Entre los más importantes tenemos que enumerar los de HerraméIluri, Varea, AgonciIlo, Calahorra, Alfaro, Arnedo, Albelda, Alberite, Ausejo, Bobadilla, Cellórigo, Entrena, Foncea, Galilea, Gimileo, Matute, Medrano, etc. En algunos de ellos se encuentra también cerámica tardía propia de los s. III y IV, en estos casos concretos no dudamos de que estos materiales procedan del centro de producción de Tricio, que sigue activo en este período, pero en yacimientos más alejados, a partir del s. III no pensamos en un comercio tan amplio, sino que cada región se abastecería por sí misma y el número de alfares de cerámica sigillata tardía tiene que ser muy numeroso.
El impacto de la crisis del s. III en los centros de producción estudiados deja sus huellas, obligándoles a cerrar bastantes talleres, ya que no había una demanda exterior. La Mauritania no tiene documentada cerámica tardía y las relaciones comerciales tuvieron lugar durante los s. I y II con nuestros talleres (31), pero no en los s. III y IV (32); igualmente la Lusitania, Conímbriga, Emerita así nos lo confirman, la Bética y Tarraconense, igualmente. Los yacimientos enumerados a lo largo de nuestro estudio que comercian con nuestros talleres son de romanización muy temprana, bien comunicados y con una densidad demográfica importante.
Algunos de estos yacimientos tienen datos cronológicos, esenciales para fechar los productos fabricados, es el caso de Liédena, los materiales inventariados son del s. II; de Funes, de época de Domiciano-Trajano; de Julióbriga, segunda mitad del s. I; Murias de Beloño, del s. II (33); Numancia, del s. I, ciudad donde mejor se comprueba que dada la proximidad de los centros alfareros no necesita comprar productos gálicos y aretinos que aparecen de forma muy esporádica; Ampurias, con cronología del s. I y s. II; Mérida, del s. I, y las marcas de alfarero encontradas en las ciudades mauritanas de época flavia e, incluso, anteriores: G.COR.FVSCI, O.L.SEM.VALE, AGILIANVS, G.FRONTINVS PATERNVS, AGILEIVS, MTR, EX OF T .L.S. y otras, al contrario, son posteriores, de época de Adriano (117-138) como EX OF SA, encontrada en el sector Este de la basílica de Volúbilis en un nivel con monedas de Adriano. De la misma época se encuentran fragmentos hispánicos en Ostia, según Carandini.Todos estos datos parciales nos aportan una cronología para los talleres riojanos de mediados del s. I hasta el II, lo que nos indica en cuanto a las ciudades interiores que las vías romanas en este período tuvieron un tráfico comercial denso, las de Caesaraugusta-Asturica, ya la que pasa por la Rioja, Cascantum, Calagurris, Vareia, Virovesca, Segisamo, Sahagún, Lancia, Asturica o la que sigue el curso del Duero por Numancia, Uxama, Clunia, Rauda, Ocelodurum (Zamora) hasta Astorga; la de Emerita-Asturica y, por fin, la que comunicaba Caesaraugusta-Emerita por Segontia, Titulcia y Toletum, a las que hay que añadir en época flavia, todos los ramales que unían las poblaciones del Noroeste, que en esta época, como el resto de la franja cantábrica, experimenta un auge económico y comercial, al que hay que asociar la vía Aquitana de Burdeos a Astorga.
El comercio transpirenaico estuvo facilitado por la vía Pompaelo-Aquitania, por Roncesvalles (recordemos que Pompaelo estaba bien comunicado con la Rioja Alta), y fue la vía utilizada para dar salida a los productos hacia el Sur de Francia, puesto que la vía por Somport a través de Caesaraugusta sería más transitada posteriormente. En cuanto al comercio marítimo se realizaría por vía fluvial hasta el puerto de Dertosa, de donde se distribuirían los productos hacia el puerto de Ostia, de época de Claudio, hacia los puertos de la Narbonense, ArIes o Marsella, otros seguían la ruta baleárica y hacia el Sur, haciendo escalas en Saguntum, Lucentum, para continuar hacia las vías de penetración fluviales del Guadalquivir hasta Hispalis, del Guadiana hasta Mérida, y hacia el Norte de Africa.
Por último los niveles de producción fueron muy elevados, de tal manera que estos centros de producción abastecen todas las zonas descritas, por consiguiente más que hablar de gran número de talleres dispersos por toda Hispania, tesis actual, hay que decir que se trata de un grupo muy uniforme, bien localizado, muy industrializado, de gran productividad y tradición; son varias las generaciones de un mismo taller las que están documentadas; por este motivo la mayoría de los alfareros recogidos en los índices tienen relación con los de Bezares, Tricio y Arenzana de Arriba. En un croquis hemos ido apuntando las relaciones existentes entre los nombres de los alfareros de los centros de producción estudiados y los de otros alfareros hispánicos. A primera vista resulta muy complejo, pero estudiando cada alfarero en particular nos proporciona datos muy interesantes de alfareros que no están en estos centros, en el estado actual de la investigación, pero que con el tiempo aparecerán, ya que uno o varios nombres de la misma marca pertenecen a los alfareros riojanos, y por otra parte se encuentran en yacimientos con productos de estos talleres. Por ejemplo, ATTI.PATER está documentado en Julióbriga, Mérida y Conímbriga, donde existen mayor número de vasos de nuestros talleres y, además, PATERNVS es alfarero de Tricio y ATIVS es una marca extradecorativa de un vaso decorado de Lixus, lleva dos punzones idénticos a los estudiados, luego A TTI. PATER es un taller, lo más seguro, instalado en Tricio, fruto de una asociación profesional de los dos alfareros o reflejo de unos vínculos matrimoniales, hecho que tenía que ser muy frecuente en una zona dedicada por completo a la alfarería.
NOTAS
(1) GAVELLE, R.: "Lugdunum Converarum et L'Espagne", Revue de Comminges. 1960, págs. 134-135 y lám. 3-6; MEZQUIRIZ, M. A.: "Aportaciones al estudio de la expansión de la sigillata hispánica en el Sur de Francia", A.E. Arq., XXXIII, 1960, págs. 210-214.
(2) MAYET, F.: "Expansión de la céramique sigillée Hispanique en Aquitaine", M.C.V., T.V., 1969, págs. 73-101; MARTÍNEZ MUNILLA, C.: "Vaso de terra sigillata hispánica hallado en Marsella", A.E. Arq. núm. 79, 1950, págs. 210-211.
(3) MOUTINHO DE ALARCAO, A.: "Sigillata hispánica en Museus do Norte de Portugal", Guimaraes, LXVIII, págs. 249-315.
(4) MAYET, F.: "Marques de potiers sur sigillée hispanique a Conímbriga", Conímbriga, XII, 1973, págs. 5-65; DELGADO, MAYET, MOUTINHO DE ALARCAO: Fouilles de Conímbriga, IV. Les sigillées, París, 1975,(5) BOUBE, Jean: La terra sigillata hispanique en Maurétanie Tingitane. I. Les marques de potiers, Rabat. Maroc, 1965; Idem: "La terra sigillate hispanique en Maurétanie Tingitane, supplément an catalogue des marques de potiers", B.A.M., VI, 1966, págs. 115-42; Idem: "La terra sigillata hispanique en Maurétanie Tingitane, supplément II an catalogue des potiers", B.A.M., t. VIll, 1968-1972, págs. 67-109; DROUHOT, J.: "Trouvailles autour de Chellah", B.A.M. 1966, págs. 145-187; THOUVENOT, R.: Une colonie romaine de Maurétanie Tingitane: Valentia Banasa, París, 1941; Idem: "Estampilles de poteries romaines trouvés au Maroc", Bulletin de la Societé de Géographie et d'Archéologie d'Oran, 55, 1934, págs. 348-350; VERTET, H.: "Cerámica romana imperial hallada en Oued Bibi (Constantina, Argelia)", A.E. Arq., XXXIV, Madrid, 1961, págs. 204-206.
(6) La marca de Londres, OF SEMP. en forma Drag. 33 y la de Colonia, OF SEM, en forma Drag. 18 (OSWALD, F.: Index of Potters'Stamps on terra sigillata ("Samian Ware"), Margidunum, 1931, pág. 291.
(7) OSWALD, index, pág. 324.
(8) PALLARES, F.: "Terra sigillata hispánica ad Ostia", R.S.L., XXIX, 1963, págs. 69-82; BALIL, A.: "Hispania y Ostia", A.E. Arq., XXIll, 1960, pág. 216.
(9) FERNÁNDEZ MIRANDA, M.: "Productos de cerámica sigillata en Ibiza", Trabajos de Prehistoria, vol. 27, Madrid, 1970, págs. 287-289.(10) TOUTAIN, J.: La economía antigua. "La evolución de la Humanidad", t. XXII, ed. UTEHA, México, 1959, págs. 260 y ss.
(11) ROCA, M.: Sigillata hispánica producida en Andújar, Jaén, 1976, págs. 15-31, la mayoría son de la serie B, menos cinco casos de la serie A,
(12) MEZQUIRIZ, T.S.H., t. II, láms. 45-49.(13) OSWALD, lndex. pág. 231.
(14) Idem., pág. 291.
(15) THOUVENOT, R.: "Estampilles de...", Bulletin de..., 55, 1934, páginas 348-350.
(16) OSWALD, Index, pág. 5.
(17) Idem, págs. 33-34.
(18) Idem, págs. 128-129.
(19) Idem, págs. 192-193.
(20) Idem, págs. 229-230.
(21) Idem, pág. 324.
(22) M. LEGLAYS "Les gaulois en Ajrique", Latomus, LVI, 1962, pág. 29, quien habla de CAL VUS, ANNIVS y SEMPRONIVS, como alfareros gálicos, cuando son hispánicos.
(23) Idem, pág. 29.(24) BELDA DOMÍNGUEZ, I.: "Museo Arqueológico Provincial de Alicante. Marcas de alfareros en ejemplares de 'terra sigillata' descubiertos en las ruinas de Lucentum durante las campañas de excavaciones de 1932", M.M.A.P., 1945, vol. IV, Madrid, 1946, págs. 160 y ss. VENTURA SOLSONA, S.: "Museo Arqueológico de Tarragona II. Las marcas de alfareros de 'terra sigillata' halladas en Tarragona", M.M.A.P., vol. IX-X, 1950, págs. 131-165.
(25) En Mérida, Itálica, Sevilla, Almodóvar y Córdoba.
(26) En Conímbriga, Represas, Serrones y Portalegre.
(27) BOUBE: Maurétanie, pág. 106.(28) De esta forma, dice LAMBOGLIA. se podría saber si la Península Ibérica ha sido aprovisionada por la Bética o por el Levante A propos des céramiques de Conimbriga, París, 1976.
(29) Al lado del vaso hemos colocado algunos de los punzones de los talleres estudiados {dentro de un rectángulo), con lo cual se comprueba que han sido elaborados en ellos. GARABITO, Tomás: Los alfares romanos riojanos y la difusión de sus productos en el Alto Imperio. Tesis Doctoral (en prensa). Sobre este tema ya hemos publicado varios trabajos: GARABITO, T.; SOLOVBRA, M. E.: Terra Sigillata Hispánica de Tricio, I, Moldes; II, Marcas de alfarero; III, Formas decoradas. Studia Archaeologica, 38, 40 y 43, 1975-76; Idem: "Bezares y la alfarería romana del Valle del Najerilla", Boletín del Seminario de Arte y Arqueología, tomo XLI, 1977, págs. 386 y ss.(30) SOLOVERA. M. E.: Los Berones y la Romanización de la Rioja. tesis doctoral (en elaboración).
(31) Las relaciones entre el Norte de Africa e Hispania han sido objeto de un estudio muy exhaustivo. BLÁZQUEZ. I. M.: "Relaciones entre Hispania y Africa desde los tiempos de Alejandro Magno hasta la llegada de los árabes", Die Araber in der Alten Welt, Berlín, 1969.
(32) BLÁZQUEZ. J. M.: "La crisis del s. III en Hispania y Mauritania Tingitana", Hispania, núm. 108, 1968, págs. 5-37. El prof. Blázquez describe de forma muy documentada la gran catástrofe que experimentan los centros urbanos conocidos de la Mauritania a mediados del siglo III.
(33) JORDA CERDÁ, F.: "Las Murias de Beloño (Cenero, Gijón). Una 'villa' romana en Asturias", Memorias del Servicio de Investigaciones Arqueológicas, núm. 2, Oviedo, 1957.
LAS ZONAS DE COMERCIALIZACIÓN
DE LOS ALFARES ROMANOS RIOJANOSTomás Garabito Gómez
BERCEO
1977 JULIO-DICIEMBRE Nº 93