Torremontalbo
El enclave llamado Torremontalbo está situado al borde de la carretera N-232, muy cercano a la desembocadura del río Najerilla en el Ebro, y próximo a la villa de Cenicero.
Entre los edificios que componen este lugar destaca arquitectonicamente la torre.Es una construcción en sillería, de planta cuadrada (12,50 m. de lado; 2 m. de grosor de muro). Presenta planta baja y cinco pisos aunque originalmente sólo tenía baja y tres, sobre vigas de madera. La comunicación entre los pisos debió ser a través de escaleras de mano, que actualmente también se utilizan. El acceso al interior de la torre se realizaba por una puerta en arco de medio punto, situada en el lado N., a la altura del primer piso, hoy cegada. Los vanos originales están distribuidos de la siguiente manera: en el segundo piso, ventanal de arcos geminados al E. y una aspillera al W.; en el último piso, ventanales geminados en las fachadas E., S. y W.
En la actualidad, la torre se corona con escaraguaitas (Garita voladiza colocada en las murallas) en los ángulos y en el centro de los muros, voladas sobre ménsulas en saledizo y unidas por arcos de medio punto. Parece ser que a comienzos del siglo XIX se apearon las almenas que fueron sustituidas por un tejado a cuatro vertientes, y se le añadió un alto o ático de piedra y madera.
La torre conserva un escudo del siglo XVI, en un pilar de la superestructura de la cara W., que corresponde a la familia Zúñiga (probablemente colocado en este siglo).
En 1096 se cita Montalbo entre las heredades que el señor Acenari Acenaris donó al monasterio de San Millán. A finales del siglo XIII, se nombra al señor del lugar Hernán López de Estúñiga, hijo de López Ortiz de Estúñiga, familia procedente de Navarra que se asienta en Castilla a partir de 1230, al menos.
En el siglo XV, Diego de Zúñiga, obispo de Calahorra, fundó un mayorazgo (1434) para su sobrino Iñigo de Zúñiga, guarda mayor del Rey, en el que estaba incluida la casa y lugar de Montalbo. En 1500 era propiedad de Juan Arista de Zúñiga, quien lo vendió al Cosdestable de Castilla, aunque más tarde vendió Alesanco al Duque de Nájera, para poder redimir Montalbo y su castillo.
A finales del siglo XVII, la propiedad de la torre fuerte pasa por el matrimonio de Magdalena Arista de Zúñiga con su tío Francisco Manso de Zúñiga, Conde de Hervías, a este apellido, perviviendo así hasta nuestros días.
Posiblemente en el emplazamiento que hoy ocupa la torre o en sus aledaños, existió algún castillo o torreón romano, defendiendo el paso del Najerilla en la vía romana de Briones-Varea.
No hay datos concretos sobre la fecha de la construcción de esta torre fuerte, pero responde a la tipología, frecuente en La Rioja, de torres señoriales edificadas entre los siglos XIV y XV.
El resto de las construcciones son las típicas de una heredad agrícola, con viviendas para obreros, bodegas y almacenes.